top of page
Buscar
Foto del escritorAlfonso Abad Porras

VIDAWASI

Hacen apenas dos semanas que publiqué una Columna de Opinión en la que, bajo el título “¡Qué clase de Presidente!”, traté del cinismo con que actúa el mandatario peruano para, en una palabra, burlarse de las necesidades y aspiraciones que tenemos todos los peruanos, especialmente del que él llama grandilocuentemente “pueblo”. Inicié los ejemplos que ilustraban el concepto que expreso, refiriéndome a un hecho que se criticó duramente en los medios de difusión: “Asociaciones de pacientes con cáncer expresan indignación por falsa promesa de Pedro Castillo”. Esto, lamentablemente no ha cambiado en absoluto; por el contrario, Castillo se ha publicitado, una vez más hace poco, visitando un colegio y abrazando a pequeños escolares, que no podían rechazarlo por ser aún demasiado inocentes.


En esta oportunidad, sin embargo, tengo la suerte de poderme referir a algo totalmente opuesto, publicado en la revista Somos del diario El Comercio, no protagonizado por ese personaje, sino por particulares que han creado y puesto en vigencia un hospital pediátrico para tratar a niños con problemas de salud, especialmente cáncer, ubicado entre Urubamba y Ollantaytambo, Cusco, para lo que han construido la Ciudadela de Salud Infantil Virgen de Vidawasi, que fue inaugurada en diciembre de 2021 y, en los últimos seis meses, ha atendido a siete mil niños con diversas dolencias de salud. Hay una historia digna de ser contada que precede a la concreción del proyecto que lleva este nombre:


Se trata de una pareja de esposos, Jesús Dongo y Mariana Cano cuya familia, integrada además por su pequeña hija Abigail de entonces cinco años de edad, sufrió un accidente muy grave en junio de 2010, llevando al jefe del hogar y a la niña a las puertas de la muerte. Al encontrarse en tal trance, el joven y exitoso abogado Jesús Dongo, reconociendo que en su vida no había dedicado sus esfuerzos a otra cosa que a satisfacer sus necesidades personales y las de su familia, ofreció dedicarse a poner todo de su parte para salvar la vida de niños afectados por problemas significativos de salud. Sin explicación médica clara, Jesús y su hija sobrevivieron y, como expresión de gratitud, su familia decidió cumplir la promesa y fundaron VIDAWASI PERÚ, organización social a la que se dedicaron desde 2013, la cual ha construido la Ciudadela de Salud Infantil “Virgen de VIDAWASI”, como primera entrega a favor de la humanidad, gracias a la fuerza y respaldo de personas y organizaciones comprometidas con el mismo propósito.


VIDAWASI es una organización sin fines de lucro que se ha propuesto salvar miles de vidas de niños y jóvenes a través de la construcción del Primer Hospital de Pediatría Especializada y Cáncer Infantil del Perú, ubicado en Urubamba - Cusco. Es una comunidad de bienestar global que reúne a todas aquellas personas que deseen participar al lado de prestigiadas organizaciones nacionales e internacionales, con el deseo de trascender mediante acción social decidida, compartiendo sus talentos profesionales y apoyo material para ayudar a lograr la ansiada meta de descentralización genuina de los servicios de salud pediátrica y lucha contra el cáncer entre otras causas sociales vinculadas a la salud infantil, otorgando soluciones y esperanza de vida a miles de niños, que hoy no tienen la oportunidad de acceder a servicios especializados, provenientes de las zonas más vulnerables del Perú.


Bajo la mística de que “Los milagros se pueden hacer realidad cuando más personas tienen el mismo objetivo”, han definido como visión de su entidad la de “Ser una comunidad líder en salud infantil, que une esfuerzos para lograr la descentralización genuina de los servicios de salud pediátrica y lucha contra el cáncer infantil en beneficio de las poblaciones más vulnerables”; y, se han fijado la misión de “Generar vida, ofrecer una oportunidad que una al mundo para el cuidado de la salud infantil bajo los pilares de amor, ciencia y dignidad para los niños y sus familias”.


De acuerdo a la información que he podido recoger en la citada publicación periodística así como en internet, el matrimonio destinó un terreno de 13 hectáreas de su propiedad, cuya finalidad inicial era la construcción de un hotel de turistas, a la creación de la citada ciudadela como obra social. Las instalaciones de Vidawasi son amplias, cuentan con jardines y pabellones, una plaza interior y una capilla; en una de sus edificaciones, tiene habitaciones con camas amplias, para que los padres acompañantes de sus menores hijos enfermos y provenientes de lugares alejados, puedan quedarse junto a ellos si resultan con orden de internamiento. Otro edificio de la ciudadela, es la villa médica, que sirve de albergue a algunos médicos residentes y a facultativos extranjeros que la visitan. Desde su apertura, ya ha sido sede de algunos congresos médicos.


Con apenas pocos meses de gestión, Vidawasi tiene una importante alianza con el hospital St. Jude, de Tenesee - EE.UU. Forma parte de su directorio consultivo el célebre doctor Patch Adams; asimismo, su vicepresidente de directorio es el también célebre, por su gestión como Presidente del Comité Organizador de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos de Lima 2019, Carlos Neuhaus Tudela. Ha recibido el premio Esteban Campodónico, que otorgan la Universidad de Piura y la Fundación Clover de Nueva York; cabe mencionar, que dicho premio consistió en la donación de 50 mil dólares, como incentivo para impulsar la labor del centro de salud. La próxima meta de la organización, fijada para dentro de seis meses si las cosas marchan sin contratiempos, es poder brindar atención oncológica especializada y cirugía pediátrica en Cusco, para lo que requieren terminar un pabellón.


Hechos como el que termino de narrar, hacen que nos podamos sentir mucho mejor con el mundo en que vivimos, a pesar de que existan seres como el actual Presidente del Perú, para quien en su presentación de la historia de la Ciudadela de los Niños Vidawasi, la editora de la revista Somos, Rafaella León A., tuvo unas palabras muy merecidas por dicho funcionario, que considero pertinente repetir aquí:


“Qué enorme diferencia hay entre esto y gritar a los cuatro vientos que el Gobierno desembolsará miles de millones de soles para los niños con cáncer, y mostrar un cheque grotesco, falso e inmenso, que nadie va a cobrar, y además exhibir en Palacio a los niños enfermos, en un show para las cámaras, ideado por miserables.” Termina diciendo, “Felizmente hay quienes hacen bien las cosas, sólo por amor …..”.


Es cierto, existen personas de buen corazón, que incluso hacen obras de bien sin gestos rimbombantes, que llevan a cabo dichas obras en total silencio y sólo haciendo el bien por el bien mismo. Para ellos, en este caso para los esposos Jesús Dongo y Mariana Cano, mi pleitesía más rendida y mis votos porque puedan continuar y engrandecer su obra, tanto porque seguirán haciendo el bien a los demás, como porque se lo merecen.


Ojalá otros sigan su ejemplo.


112 visualizaciones2 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

ESSALUD

2 Comments


adrianosarar
Oct 02, 2022

Excelente tus comentarios Alfonso

Like
Alfonso Abad Porras
Alfonso Abad Porras
Oct 03, 2022
Replying to

Muchas gracias por tu lectura y comentario sobre mis Columnas de Opinión, Adriano.

Like
bottom of page