En noviembre de 2018, publiqué una columna titulada El Adulto Mayor. En ella, llegaba a una conclusión importante: se debería dejar, a este ser humano, que decida si quiere jubilarse o si desearía continuar trabajando en la empresa a la que brindó, probablemente, muchos y los mejores años de su vida; planteaba alternativas para que dichas personas pudieran seguir brindando su contribución laboral a la misma empresa.
En esta oportunidad, a continuación me ocupo de dos posibilidades de aprovechamiento laboral de quienes actualmente ya están jubilados y fuera de las empresas en las que podría haberles gustado seguir laborando. Es decir, dos alternativas para el aprovechamiento de la capacidad y conocimientos alcanzados por quienes gustarían seguir trabajando para sí mismos, sus familias, sus comunidades y/o su país, en general.
El manejo comunal de las circunscripciones provinciales y distritales, se efectúa a partir de la búsqueda de satisfacción de las necesidades de sus vecinos, las mismas que son puestas en conocimiento de las autoridades locales, de manera general, por pedidos expresos que se hacen llegar a ellas, entre otras formas, desde las Asociaciones de Vecinos existentes en la población; por medio de las Audiencias Vecinales que lleva a cabo el Alcalde respectivo; y, por sus propios medios de detección.
A pesar de existir las modalidades de toma de conocimiento de necesidades de servicio y desarrollo indicadas, una importante mayoría de vecinos considera que sus inquietudes y necesidades particulares no son atendidas, así como que es imposible, o muy difícil, poder darlas a conocer a quien corresponda: las autoridades locales, en este caso.
Y es que no se llega de manera personalizada a los vecinos, generalmente porque no se dispone de los recursos y formación para hacerlo; pero también, y principalmente, por hábito.
Por medio de la presente Columna de Opinión, pretendo aportar una idea que propugna mejorar la relación entre las autoridades locales y los vecinos de su jurisdicción, así como dar a conocer cuáles son las mencionadas necesidades individuales de estos, mediante la realización de encuestas, “casa por casa y urbanización por urbanización”.
La idea en cuestión, consiste en llevar a cabo visitas concertadas individualmente a los vecinos, para determinar sus necesidades y/o prioridades en relación al manejo de la circunscripción, lo que permitirá crear una base de datos de la cual se puedan y deban servir las autoridades locales para la elaboración y puesta en marcha de sus planes de desarrollo y servicio a su respectiva comunidad.
Esta actividad puede ser asignada a personas de la Tercera Edad, también llamadas Adultos Mayores, porque tienen la experiencia de vida y la paciencia suficientes como para entrevistar a los vecinos de su comunidad, inspirarles la confianza necesaria como para brindar sus ideas y hasta sus quejas sobre el cumplimiento o incumplimiento de la autoridad municipal respecto a sus expectativas personales. Por su parte, quienes asumieran esa actividad, sentirían que están efectuando no solo un trabajo, sino también contribuyendo a mejorar la calidad de vida de la comunidad de que se trate, por lo que se dedicarían con la experiencia de sus largos años de trabajo y de vida a sacarla adelante con éxito.
Una segunda posibilidad laboral para estas personas, siempre dependiendo de las autoridades locales respectivas, es asignarles la responsabilidad de verificar el cumplimiento de las disposiciones ediles que rigen el día a día de la vida comunal, dedicándose a la observación directa del devenir cotidiano en sectores o arterias que se le asignen, rindiendo informes periódicos de las incidencias observadas, sin intentar resolver por su cuenta situaciones inesperadas y fuera de lo dispuesto, según sea el caso. Con toda seguridad, muchos Adultos Mayores encontrarían esta actividad como un entretenimiento productivo, de su responsabilidad.
Este, es un intento de atraer la atención sobre un sector de la población que, en un significativo porcentaje, se siente relegada por cuestiones de edad.
Interesantes propuestas,qué importante el trabajo de Adultos mayores en la comunidad que viven, porque además que son útiles y ganarían un extipendio por su trabajo, van a contribuir a que su comunidad sea atendida y mejore la comodidad diaria. Creo que es una buena propuesta para que los Municipios la pongan en marcha, pero además deben apoyar este proyecto las Asociaciones, Empresas, Cámaras y los Grupo unidos de Adultos Mayores, será bueno recibir muchas opiniones.