Según propio recuerdo de sus promesas de campaña electoral, el actual Alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, inauguró el viernes 12 de mayo la primera Playa Artificial de su gestión. Dicha playa era la piscina del parque zonal Huiracocha, a la que se le ha adicionado arena, palmeras, caballitos de totora y un bote. Tuvo una inversión de aproximadamente 145 mil soles, según Luis Molina, presidente del Consejo Directivo del Serpar. La extensión de la playa, es de 2500 metros cuadrados.
En su discurso de inauguración, el Alcalde de Lima Metropolitana dijo que la playa será un espacio de esparcimiento y recreación para más de 10 millones de vecinos de Lima Este, que no tienen acceso a un balneario cercano, para que puedan disfrutar de un lugar implementado con arena y palmeras; dijo, también, que “la experiencia de las playas urbanas no es nuestra, en muchas partes del mundo existen para la población que tiene que caminar más de 20 kilómetros y es muy difícil, para una mamá que tiene que darles entretenimiento a sus hijos”; el pasado 26 de marzo, el alcalde de Lima anunció que la playa artificial estaría en un lapso de 45 días y, al igual que ese día, en la inauguración confirmó que la obra aún no tendrá olas.
“La playa urbana es un plan nuestro. Justamente lo que he cuidado es que sea arena propia de playa. He pedido hacer más playas urbanas. Tenemos que pensar en todos los distritos que están lejos del mar. Busco experiencias internacionales para traer un equipo, para traer olas”, dijo López Aliaga.
El Alcalde de Lima recalcó que este fue un ofrecimiento de campaña, con la finalidad de que la población en el distrito no deba desplazarse tantos kilómetros para acudir a la playa. López Aliaga destacó que, aunque el frío se ha apoderado de la capital, la nueva 'playa artificial' será aprovechada al máximo durante la próxima temporada de verano del año 2024. “Sé que estamos en invierno, está bien, pero la tenemos lista para el verano que viene”, aseveró.
Las nuevas instalaciones del parque Huiracocha motivaron algunos comentarios negativos; los principales, se refieren al posible ingreso de arena al agua y la idoneidad de la obra. Al respecto, el diario El Comercio publicó la opinión de dos arquitectos urbanistas sobre el diseño y pertinencia de la construcción de la playa artificial en el parque zonal Huiracocha.
La arquitecta Karina Puente, considera como un despropósito la construcción de la playa artificial: “Es una obra inútil dentro de uno de los parques mejor mantenidos y consolidados de Lima. Además, no es el momento: estamos en mayo entrando al invierno. Hay problemas más importantes por atender en SJL y en Lima, como el funcionamiento de los corredores complementarios”. Por su parte, Aldo Facho Dede, arquitecto cofundador de la Red Latinoamericana de Urbanistas, sostiene que cualquier mejora de la infraestructura recreativa es una buena noticia “siempre y cuando se realice en el marco de un proyecto integral que mejore a todos los espacios del parque”; en ese sentido, Facho Dede sostiene que también debe fortalecerse el mantenimiento de las áreas verdes del parque Huiracocha, ya que “SJL es el distrito de Lima con menos área verde recreativa por habitante”.
Con respecto al diseño de la obra, Puente señala que se trata de una propuesta simple. De acuerdo con la especialista, el principal inconveniente de las obras en la piscina del parque zonal es la colocación de arena. “Si han puesto arena fina que se usa en construcción civil, la piscina siempre va a estar sucia y será un dolor de cabeza su mantenimiento, más aún ahora en un contexto de escasez de agua”, argumenta Puente.
Facho Dede coincide con esta preocupación: “La gente se va a parar y recostará el cuerpo sobre la arena y la llevarán hasta la piscina. El viento que circule por allí también hará que ingrese arena. El municipio debe asegurar que el volumen de arena que se desplace a la piscina no perjudique el mantenimiento ni la recirculación del agua, por ejemplo, tapando los sumideros. Esto demanda mayor costo de mantenimiento”. Por otro lado, el arquitecto indicó que la implementación de olas artificiales en la piscina del parque Huiracocha sería imposible, pues involucraría “cambiar por completo todo su diseño”.
Independientemente de los comentarios negativos de ambos especialistas citados, considero pertinente agregar que la labor del Alcalde Metropolitano no es, precisamente, “esparcimiento y recreación” al vecindario de la ciudad capital; es decir, si de paso o paralelamente a las obras que pueda llevar a cabo lo logra, se ganará aplausos y será mejor vista su gestión. Si, por el contrario como se ve actualmente, sólo va a lanzar una pequeña “obrita” como la comentada, manifestando su intención de hacer otras similares, va a lograr que se le critique y que, como ya ha aparecido en algún periódico, se promueva su defenestración.
El señor López Aliaga ha anunciado que va a empadronar a los taxi-colectivos que pululan por las principales calles y avenidas de la ciudad, haciendo competencia a las líneas de ómnibus con las que gestiones anteriores a la suya, de la mano con la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), de bastante reciente creación -fue fundada el año 2018-, intentaron poner orden en el transporte público y el caos vehicular reinantes principalmente en Lima, pero también en el Callao, contratando y estableciendo el funcionamiento de los llamados corredores complementarios, pero garantizándoles que iban a desaparecer de sus rutas las demás líneas de servicio público y, por supuesto, toda competencia desleal.
Esa condición, de acuerdo a lo que todos vemos o nos enteramos por los medios de difusión, no sólo no se ha cumplido, sino que autoridades que deben tener sus propios intereses, como los congresistas que pretenden dar carta blanca a la existencia de líneas de servicio público a cargo de automóviles, es decir los taxi-colectivos u otro tipo de vehículos como las camionetas combi que circulaban hasta hace poco, así como el alcalde capitalino de acuerdo a sus recientes declaraciones.
Si el señor López Aliaga desconoce o no quiere cumplir su obligación de trabajar por el bien de la ciudad de la cual es alcalde, su Concejo Municipal le debe enmendar la plana; dado que esto no es probable que ocurra, porque el citado señor es el jefe máximo del partido por el cual postuló -Renovación Popular- y tiene mayoría en el citado concejo, mal que nos pese porque no es una situación que la ciudadanía pretende, tan pronto se nombran nuevas autoridades, ese propósito de defenestración hasta ahora tímidamente anunciado tomará cuerpo.
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