Independientemente de la pandemia que estamos viviendo, una de cuyas consecuencias más notorias ha sido durante el año 2020 el dictado de clases virtuales a todo nivel, lo que amenaza con mantenerse en buena parte del año en curso, todos los años egresan promociones de estudiantes de instrucción secundaria de los colegios, en cantidades exorbitantes para las ofertas de estudios superiores y de trabajo que ellos pretendan aprovechar.
Sin poner énfasis en las grandes cantidades de desempleados que ha producido también esta pandemia, el mercado es cada vez más duro y difícil para quienes aspiran a ocupar un lugar en el, sea con el objeto de proseguir estudios que los capaciten para desenvolverse en la vida o, para dedicarse directamente a alguna actividad laboral porque las condiciones económicas familiares así lo exigen.
Los egresados escolares que forman este último grupo, que resulta siendo muchísimo más numeroso que el de los que continúan estudios por demasiadas razones, probablemente la principal de ellas la escasa oferta de formación académica superior, dedican sus energías a ofrecer sus servicios laborales a las empresas con las que se topan en su nueva forma de vida; o, si tienen la posibilidad -en un número mínimo de casos por razones obvias-, se lanzan a emprender alguna actividad lucrativa -negocio- que resulta engrosando el elevado número de pequeñas y micro empresas -pymes y mipes- que existen en el Perú.
Periódicamente vemos noticias que nos dan a conocer que el Perú es uno de los países con mayor cantidad de pymes, porque cada año se crea gran número de ellas; no se informa en cambio la cantidad de las que se cierran o quiebran que son por lo menos, dos terceras partes de las que se aperturan. Esto último, se debe básicamente a que casi todas las pequeñas empresas así constituidas, se forman sin conocimientos de base para salir adelante, tan sólo con el optimismo de quienes las crean.
Una de las graves consecuencias de la pandemia que nos viene causando tanto daño, es que se haya producido un desempleo enorme en el Perú; incluso que, también en muchos casos, el desempleo haya sido consecuencia del quiebre o cierre de las empresas para las que trabajaban los nuevos desempleados. Si esto se agrega a la inmensa cantidad de gente necesitada de trabajo proveniente de las promociones escolares anuales, es de entender que la situación en este aspecto no puede ser más crítica.
Dado que la oferta de estudios superiores es muy limitada en comparación con la demanda de la misma, es mi opinión y sugerencia que, a nivel de egreso de la educación secundaria se establezca una formación básica en la actividad empresarial, para permitir a los nuevos exalumnos escolares la creación de pequeñas empresas que puedan aspirar a hacerse un sitio en el mercado empresarial; es decir, que cuenten con fundamentos de conocimientos que eviten su fracaso empresarial por falta de formación en esa área.
Esta formación o capacitación, sería brindada por los propios colegios a sus salientes educandos y/o a quienes quisieran recibirla para mejorar sus posibilidades de establecerse en el mercado de esta manera. Los horarios y modalidades educativas serían establecidas respectivamente por cada centro de estudios, mientras no se creara una entidad que estableciera la normativa pertinente, pero lo recomendable sería que esta actividad, diferente de la que corresponde a la formación básica regular dividida en Nido, Primaria y Secundaria, tuviera características diferentes, comenzando por su horario de dictado.
La capacitación a ofrecer, constaría de los siguientes temas: Mercado; Emprendimiento; Pymes y Mipes; Requisitos para su constitución; Idea de negocio; Plan de negocio; Fondos concursables; Administración empresarial; Gestión de negocios; Tributación; Negocio en marcha.
Si bien este proyecto estaría dirigido a la población que egresa de la educación secundaria, es de suponer que no sólo este segmento poblacional podría tener interés en capacitarse para emprender un negocio o el mejoramiento de su empresa en marcha, se podría ampliar a este segmento el dictado de programas paralelos de capacitación, con temas tales como: Idea de Negocio; Plan de Negocio; Fuentes cooperantes; Fondos concursables; Principios de Contabilidad Básica; Administración empresarial; Gestión de negocios; Tributación; Negocio en marcha.
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